"Buenas atracciones, pésima atención cliente"

Entradas de acceso bastante caras. También tienes que pagar el parking si vas con coche (lo más habitual). Pago de parking excesivo (14€ al sol y 17€ a la sombra). Al entrar nos encontramos con un control donde nos indican que no podemos entrar con un par de bocadillos que teníamos preparados, con lo que lo dejamos en el coche y si los quieres comer, tienes que entrar y salir del parque para ir al parking (eso era un botellón porque nos pasó a muchos de los que fuimos). Gracias a esa medida te obligan a consumir en el parque (aunque ya lo íbamos a hacer, pero aún más). Lo que esperas al menos, es que el trato sea rápido y eficiente, y que la comida tenga cierta calidad, pues las camareras no podían ir más lento… nos mirábamos unos clientes a otros alucinando con la pasimonia que tenían, y como era de esperar… la calidad de la comida bajita.

Creo que ya que pagas por respirar en la Warner, deberían aumentar sus estándares de calidad y como mínimo, igual que en el resto de parques de atracciones, que no se prohiba meter comida ni pagar parking (entiendo que dada la localización, deberían contar con que vas en coche y que con lo que pagas por entrada, el aparcamiento debería ser gratuito).

Si vas a subirte en atracciones y no te importan tanto los espectáculos ni la tematización, te recomiendo el parque de atracciones de Madrid porque las atracciones no le envidian en nada.