El Parque de nuestra infancia y adolescencia ha cambiado con el paso del tiempo. Ha sabido adaptarse a su público, al target que lo hace sostenible. Si vas con niños o te gusta la adrenalina, disfrutarás. Sus sombras inigualables, sus colas de menos tiempo y la variedad de atracciones infantiles mejora la oferta para niños respecto a Parque Warner Madrid. Tarántula es una spinning divertida, Tornado una loable propuesta de Intamin a pesar de su layout conservador, Top Spin una grata experiencia aunque no tenga la efectividad de Talocán, o Lanzadera una free fall resultona donde rascar algo de airtime o, al menos, disfrutar de unas magníficas vistas de Madrid. Si no te van las coaster o las flat rides adrenalínicas, o no estás en edad de montar en atracciones infantiles, o no tienes a mano un fisio para recuperarte de las zamperlas, este no es tu parque, ni lo pretende. El mayor agujero está en la ausencia de dark rides y de atracciones de corte familiar, con intentos felizmente olvidados como Fantasía o el río de la Tranquilidad. Entre el plantel solo el TNT de Gerstlauer o el Vértigo de Mack Rides viene a cubrir, en parte, el target menos adrenalínico. No obstante, este es un parque que se mantiene limpio, que se pasea de forma agradable, que luce buena vegetación, y que incluso tiene rincones de paisajismo muy efectivo (alguna zona de restauración de corte pirata en el entorno de Fiordos tiene su punto). Sería mejorable, sin duda, pero quizá no de una forma sostenible. Solo una cosa debo echar en cara a la gestión del espacio: en el trato de respeto y honor a sus glorias. Aquí el Parque ha subestimado algunos de sus símbolos, como la añorada noria, o la descuidada jungla. Un reopening de la jungla con un buen lavado de cara sería una gran noticia. Sin chicles en los puentes, sí, pero me duele la trompa rota de ese elefante que antaño nos mojaba. No debe infravalorarse al visitante nostálgico, al de la tortilla de patatas en el merendero en los 90. Porque esa es la esencia del parque. No nos quiten el cóndor (esa nueva versión de Rotor más lento tiene su punto), las sillas voladoras o la jungla. O nos habrán quitado, sin querer, un pedazo de nuestra infancia y la oportunidad de contarles a nuestros hijos cómo un día fuimos felices en el bonito y emocionante Parque de Atracciones de Madrid.
Me parece muy elevado el coste de la entrada para luego tener que hacer filas hasta de 30min para subir a una atracción y que la atracción dure menos de 2min.
"bastante bien"
10 tetekofireball
hemos hecho un monton de actividades. Nuestro experiencia fue en general muy bien y lo hemos pasado de maravilla.
Opinión verificada