Terra Mítica ha apurado hasta el último día de plazo legal para ordenar el pago de la nómina de sus trabajadores correspondiente al último mes. Así lo reconocieron ayer a este periódico fuentes de la plantilla, que temían que el parque no pudiera hacer frente a sus obligaciones salariales con el personal fijo, así como las correspondientes al segundo pago en el caso de los fijos-discontinuos.
Sin embargo, la dirección del complejo benidormí tramitó ayer por fin la orden para los ingresos, tras las quejas manifestadas a lo largo de la pasada semana por los empleados, que comprobaban cada día como seguía sin entrarles el dinero en sus cuentas.
Las mismas fuentes sostienen que los problemas financieros han podido obligar a dilatar esta situación, en espera de la recaudación obtenida por la llegada de público durante el fin de semana.
Lo que es incuestionable es que la preocupación ha crecido de forma notable entre el personal, porque hasta ahora se habían cumplido con normalidad los habituales plazos de pago, sin llegar hasta el límite del décimo día del mes como ha ocurrido en esta ocasión.
Y es que el acuerdo, alcanzado hace más de cinco años en una comisión paritaria, establecía que en el caso de los trabajadores fijos-discontinuos las tres primeras semanas de trabajo de cada mes se cobrarían durante los últimos días del mes en curso y el resto de la nómina en un segundo pago antes del día 10 del mes siguiente.
Distinta es la situación del centenar de trabajadores fijos, ya que el cobro de la nómina se hace en una única vez.
Por otro lado, las inquietudes sobre el futuro del parque y su posible venta eleva aún más la inquietud, porque se desconoce que va a ocurrir finalmente.
Eso sí, mientras los sindicatos vienen quejándose de la falta de comunicación con la actual dirección. La sección sindical de CC OO alerta en su blog del llamamiento desigual que se está produciendo a la hora de que la plantilla entre en actividad, «con muchos retrasos en la incorporación de los trabajadores de 1.200/1.600 horas -larga duración- y aún más ausencias en el caso de los de entre 350/600 horas». Además, revelan que hay «muchas unidades cerradas en restauración y merchandising», así como también «espectáculos a medio gas». Y concluyen que «las reuniones mantenidas con la empresa son huecas y vacías», que no tiene en cuenta a los sindicato.