Voy a escribir esta entrada dándome cuenta que no hablé el año pasado de la kdd de Halloween en el Parque de Atracciones, aunque realmente lo que fueron fue colas y colas y poco montar...
2013. 2 de noviembre. Madrid, Casa de Campo. Hace tan buen tiempo que voy en manga corta. Es hora de reunirse con el equipo Barcelona-Girona-Teruel que ya han llegado hace un rato. Como vienen sin desayunar me encargo de llevarles algunas provisiones no sea que les de un yu yu.
Gente, gente y gente en las colas, gente en Información, y más gente, es lo que tienen los puentes que o la gente se queda o se van, pero los que se quedan van siempre a los mismos sitios. Uno de esos lugares es el Parque de Atracciones de Madrid desde 1969, año de su apertura, donde estábamos nosotros.
Tras conseguir entrar se queda en el escenario de la plaza principal, allí conozco a bastante gente nueva de este lugar, todos muy simpáticos y majetes. Así que ya en grupo pack (Sonido de platillos) nos vamos a montar en cosas, que si un Abismo, La Tarántula, el Tornado... tras ello llega el turno del terror.
El Viejo Caserón es un clásico del parque, había que aprovechar a estas horas que había poca gente, lo que no sabíamos es que esperando la cola nos encontraríamos como, durante unos minutos, los habitantes de este lugar saldrían por los alrededores y la zona de colas a meter un poco de miedo en el cuerpo. También nos quedó claro que a veces el ir con un grupo de chicas teen chillonas no significa que vayan a chillar más que tú... Ejem, ejem. No hay renovaciones de decorados aunque si que se han currado más los escondrijos de los seres de ultratumbas chungos que hay en su interior.
Este año hay tres pasajes de terror gratuitos y, hay que reconocer, que los malos ratos te los llevas, al menos más que en años anteriores: Fast Blood es un restaurante en el que nosotros somos la comida, se han utilizado elementos del pasaje del año pasado (Necronomicon) pero ya se notaba el aumento en el número de actores que salían de los lugares más inesperados. Afortunadamente salimos por la vagina gigante y renacimos...
Space Nightmare es quizás el caso más extraño de todos: Por un lado el nombre de la película de Bob Esponja que se pone habitualmente cuando no es Halloween aparece a lo grande en la fachada. Algún niño tuvo que salir antes de entrar porque exactamente Bob Esponja no iba a estar ¡A no ser que apareciera muerto! Al entrar uno no sabe si eso es una nave espacial y tampoco porque nos recibe un monje ciego que parece haber viajado en el tiempo desde la Edad Media. Esa es la magia de Disneyland... ¡Ains no, que esto no es! Bueno, esa es la gracia.
Acabamos con Puerta del Infierno es un bonito viaje lleno de luz fosforita, de sorpresas inesperadas, de muñecos malrolleros y de gritos, botes y saltitos de quinceañera emocionada por ver a los Auryn -versión para gente de 30: Back Street Boys- pero sólo por el mal rato que se pasa ¿Por qué narices ponen esos muñecos mal rolleros y un ropero de esos que sabes que puede salir cualquier cosa? Tras este pasaje mi afonía era ya evidente, y a día de hoy lo sigue siendo.
Acabamos el día con Vértigo donde algunos gritaron de manera memorable, la parte superior es un continuo "Vamos a morirrrrr... Wiiii" en cada uno de los giros que daba, aunque yo acabé llorando de la risa, literalmente. De ahí salimos corriendo, y a toda velocidad, a ver la Parada Zombie, que sale a la plaza del Star Flyer -Torre del árbol, queremos que vuelvas-. Aquello no sé si daba más miedo por la cantidad de visitantes o por los seres de ultratumba que salían a dar un voltio.
El Halloween del PAM hay que reconocer que a nivel pasajes está bastante bien, pero creo que a nivel decoración y animación le falta algo más. Eso sí, la música acompañaba perfectamente a la acción: todo bandas sonoras de películas y de series, como por ejemplo Expediente X, ya sabéis que la verdad está ahí fuera. Aunque he de reconocer que eché de menos el Halloween de Aqua.
Algunos siguieron consiguiendo credits en atracciones de niños, no miro a nadie, y otros ya decidimos que era hora de sentarse, para acabar de compras y extendiendo, parte de nosotros, un rato más el día cenando fuera y tomando algo. Pero eso es ya otra historía diferente...
Hacía un año que no iba a una de estas quedadas y siempre mola conocer a gente nueva interesante. Un placer todos con los que estuve, a los de siempre que ahí siguen (@naki, @beateruel, @uspablo, @Fernandete y @edudito, éste en espíritu que al final no pudo venir) y que contaron sus anécdotas del último Halloween Voyage, a los nuevos, especialmente a @rollerfun, al que le debo más de una... de una venganza, que juro que haré (Acompañar de risa maléfica), @Raulen, de aquí al contrato con El Viejo Caserón hay un paso y @mymbob, que vino al after parque y a la que la debo listas musicales.
Un placer regresar para encuentros así y a ver a antiguos compis de atracciones que siguen ahí al pie del cañón. Por otro lado una pena no ver a gente que me hubiera apetecido ver por estos lares, como en los viejos tiempos, leasé exactamente @musiccc86, @edu y @odros.
Por cierto, hablando del Voyage escribí una entrada sobre él en mi blog, Confesiones tirado en la pista de baile, hablando de esa época en la que no faltaba ningún año. Ains... Podéis leerla en el enlace adjunto.
(Foto de grupo propiedad de @naki, que se la he robado)
