No sé cuantas veces he podido visitar este parque, ni cuanto habré montado en Dragon Khang pero desde haces años siempre he querido visitarlo en Halloween , pero nunca he podido y si a eso le sumamos el querer probar Shambhala ya tenemos la escusa perfecta!

Aquí va mi resumen:

Viernes 15:

Después de unas casi 9 horas de coche desde Málaga, a eso de las 12:00 h llegamos a Salou, Apartahotel Best Da Vinci (Ya que debido a un problema de fechas, atrápalo nos desvió del hotel que aviamos escogido a este) Nuestra intención era dormir en alguno del parque, ya que los domingos cerraban no pudimos hacerlo. El hotel ni fu ni fa, muchos viajes de incerso (creo que éramos los únicos jóvenes allí alojados) agua de la ducha fría... el Buffet... muy poco variado y poco mas... Decidimos salir a tomar unas cervezas que acabaron en alguna que otro copa y a dormir porque nos esperaba madrugar.

Sábado 16:

08:30 de la mañana suena el despertador y todos en pie, tras darnos cuenta que nos sobraron unas cuantas copas anoche... abrimos la cortina y después del tan precioso día del viernes... SORPRESA!! Una tormenta del copón... agua por un tubo, caras tristes y a ponerse el chubasquero, tras un buen desayuno nos dirigimos al parque y nos damos cuenta que no somos los únicos que decidimos ir ese día con lluvia. Pasamos los tornos con un mínimo de ánimo y nos dirigimos hacia Mediterráneo para darnos cuenta de que Furius Baco estaba cerrado debido al tiempo. Decidimos aprovechar para hacer unas fotos por Polynesia y Sésamo  Aventura cuando nos damos cuenta de que Dragon Khang está en funcionamiento. (Por mucho que me monte y muchos años que pasen, se me sigue poniendo dura cada vez que lo oigo funcionar) Nos dirigimos hacia el, 40 minutos de cola ya que solo cargan las 4 primeras filas de cada vagón.  Sigo sin entender eso de que 14 o 15 personas pasen delante de ti porque bien el primo de uno de ellos o el colega esta delante en la cola... Un poco falta de respeto. Salimos y directos  Shambhala. Digno de ver la cara de felicidad de mi novia al bajar y más si sabes que tiene un vértigo del copón!! Próxima parada, pasaje de REC soy muy fanático de sus películas y su director y la verdad creo que no lo disfrute tanto debido a un pequeño tonto que teníamos en el grupo al entrar... es mas acabamos juntándonos con el siguiente grupo...  tras salir decidimos seguir con el Tren de la mina y Estampida unas cuantas veces consecutivas, ya que nos pilló vacía de gente. Tras unas cuantas fotos decidimos ir al hotel ya que estábamos empapados y volver luego a ver La Selva del Miedo, si es que paraba el aguacero... Pero no fue así y no la pudimos ver ya que no se hizo.

Domingo 17:

Suena el despertador y sin mucho ánimo, debido a la tormenta que nos pilló durante toda la noche, nos ponemos en pie abrimos las cortinas y vemos un gran claro en el cielo!! Cara de felicidad y a desayunar  a toda prisa para aprovechar el día. Al entrar al parque todo tenía otra cara, mucha más gente, mucho más color en general, actores disfrazados por la calle y rumbo a Furius Baco por si la moscas el día cambiaba. 40 minutos de cola, ya que era lo único abierto del parque a esa hora junto a Dragon Khang. Una vez bajamos decidimos hacer la misma ruta que el día anterior pero todo con mas animo, Dragon Khang, Shambala, Estampida etc etc. 12:30h decidimos irnos hacer cola en Horror in Penitence, al llegar nos damos cuenta que hay poca gente y decidimos esperar, tenía bastante ganas de verla y la verdad que me gusto mucho, me lo pase muy bien incluso me asuste, cosa que en Rec no me paso... lastima... una vez al salir decidimos probar una vez más Estampida y hacer un parón para comer, el cual aproveche para montar de nuevo en Furius Baco (Ya que no había nada de cola) mientras mi novia y su amiga terminaban su hamburguesa...  Cervezas en mano empezamos a plantear  los horarios de los espectáculos y el templo del fuego. Mientras nos dirigíamos a ver  Rock Simphony pequeña parada en el Barco Pirata (que me gusta este clásico de atracción). Al llegar al teatro Maya pequeña sorpresa, aunque el espectáculo estaba anunciado ya no se realizaba debido a que estaban preparando el nuevo para navidad. Así que decidimos entrar en el laberinto de espejos y  subir en Hurakan Condor. Una vez arriba empezamos a sentir las gotas de lluvia, tal y como pronostico el tiempo alas 17:00h empezó el agua. Salimos y para evitar mojarnos entramos a ver el último pase del templo del fuego. Al salir... agua, agua y más agua, poner chubasquero y alguna que otra bolsa de basura dentro de las zapatillas para intentar no mojarnos. Entre foto y foto con algún que otro personaje decidimos ir a ver Love for Vampires. Resaltar aquí varias cosas, el espectáculo en si nos gusto muchísimo y nos reímos bastantes, lo único que nos sentó un poco mal fue la actitud de una de las camareras que no muy simpáticamente nos obligo a consumir si no tendríamos que abandonar el lugar... Éramos 3 personas las cuales pedimos 2 cervezas y nos volvió a insistir con 3 consumiciones o fuera... Muy simpática ella. La verdad que hace mucho que no entro en el Salón y no es por el mero hecho de consumir (la verdad que no se si en algún lado advierten de  la obligación de consumir para ver el espectáculo) si no por la actitud de esa persona hacia nosotros, la cual la tubo con varias familias más que protestaban de lo mismo. Tras acabar a eso de las 19:30 nos dimos cuenta de que tampoco se realizaría la Selva del miedo muy a nuestro pesar. Tocaba pasar por tienda para comprar algún recuerdo y coger una calabaza la cual te podías llevar al salir del parque.

Dormir y de vuelta para Málaga al día siguiente.

Para ser mi primer Halloween me gusto mucho, la tematización, el ambiente, la cara de los niños con esa sonrisa y ver que se lo pasaban en grande y los eventos como Rec, Terror in Penitence y algunos espectáculos.

Me quede con un poco de mal sabor de boca por no poder ver La Selva del Miedo y por no a ver mandando a la mierda a esa camarera tan simpática... pero algunos tenemos más educación. En general buena experiencia y repetiría sin dudarlo, todo será plantearlo el año que viene.

Aunque el tiempo no acompaño, 'puede montar en todo y muchas veces ya que las colas era mínimas, casi bajar y subir, menos en Shambhala que era algo más de 15 minutos.

Próximo año más!

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