Bueno, ya que no puedo dormir voy a contaros mi día en PA, el pasado 27 de Octubre:
Me levanté a las 7 (más bien me levantaron), nos preparemos, fuimos a desayunar a una cafetería, y en camino. Llegamos en hora y media, y en hora y cuarto vimos el Shambhala (con mis correspondientes gritos de "eeh!! hoy repetimos shambhala!!"). Compramos las entradas (con los descuentos de las cervezas XD) y entramos. Fuimos primero de todo al Dragon: 20 minutos de cola, no estuvo mal (mi amigo se medio-cagó al final, pero acabó subiendo), así que... ¡todos al Dragon! Coincidimos con los del Shambhala, así que saludamos a los de arriba (que no nos hicieron ni pajolero caso, por cierto). Luego, hicimos el recorrido, bastante bueno, e intentamos hacer el Shambhala, pero vimos que había hora y media, así que pasamos. Con el HK, había media hora y decidí sacrificarme para ir al Volpaiute, al Tomahawk, y al Silver River Flume. Antes de éste último, vimos la niña del Exorcista por ahí por Far West, y un susto tremendo nos dio a todos. Tras la... ¿media hora, 4o minutos...? de cola del Silver, montamos y nos empapamos de pies a cabeza, para aprovechar que ya nos habíamos mojado, fuimos a los Rapids. donde aún nos mojamos más. Luego, fuimos a los Wild Buffalos, y luego, a la Cantina a comer. Después de comer, como el Shambhala tenía 2 horas, fuimos a la Maldición Maya, en la cola de la cual yo y mi amigo nos escapamos al Yucatán una o dos veces, para luego volver. No estuvo mal, pero estaba muy reciclado lo del Templo del Fuego, además que el traje de sacerdote parece más bien un disfraz de Woody multicolor. Luego, fuimos al Tren de la Mina, bajamos y... HORROR. El Shambhala, el Furius, el Dragon y HASTA LA ESTAMPIDA cerrados por viento. Mi cabreo fue bastante grande, ya que mi principal objetivo era Shambhala, pero a falta de Shambhala.... bueno es Sésamo Aventura... Fuimos al CocoPilotos, al Magic Fishes y al Salto de Blas, éste último acabó nuestra experiencia PA. Me fui, algo triste por no haber subido al Shambhala, pero también contenta porque había probado más atracciones. De todos modos, voy a volver en Navidad y ésta vez sí que voy a ir a por las fuertes directamente, ¡¡NI SÉSAMO NI leches!!